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por Ben Kryzinski - miércoles 15 de septiembre de 2021
Es esa época del año en la que muchos pescadores de travesía están a punto de colgar el peso 3 y comenzar su migración anual cuesta abajo, donde el agua más grande fluye más lento y los peces más grandes disfrutan del respiro de la presión del verano.
Pero, como diría cualquier pescador acérrimo de truchas de arroyo del Oeste: “No tan rápido, Habibi”.
Las truchas de arroyo se reproducen en otoño, lo que significa que la “rutina char” está en marcha en las Montañas Rocosas. Estos peces trasplantados, aunque salvajes, son más agresivos durante septiembre y octubre que en cualquier otra época del año. Puede que sea difícil de creer, dado el sabor que poseen los brookies en todo momento, pero es la verdad.
En muchos arroyos de gran elevación, desde Nuevo México hasta Montana, arroyos de todos los tamaños (y esto es una determinación relativa, dada la longitud generalmente diminuta de estos peces invasores de los Apalaches) se juntan y comienzan a intimidarse entre sí en preparación para el desove.
Ciertamente, la trucha de arroyo seguirá golpeando moscas secas bien colocadas. Está simplemente en su ADN: los brookies son los oportunistas del universo de los salmónidos. Pero esta es la mejor época del año para literalmente cambiar de dirección y comenzar a perseguir truchas de arroyo con pequeñas ninfas y serpentinas pescadas río abajo y en el columpio.
¿Por qué? Hay varias razones por las que este método funciona mejor en el otoño, durante el período previo al desove, que en cualquier otra época del año.
Primero, los brookies son agresivos antes del desove. Es más probable que arremetan instintivamente contra cualquier cosa que se les acerque, incluso una ninfa pequeña o una serpentina de tamaño pequeño. Los Brookies, onza por onza, poseen uno de los temperamentos más cortos de cualquier trucha o char.
En segundo lugar, las truchas de arroyo no parecen perder su perspectiva de dar prioridad al alimento, incluso antes del desove (algunas truchas pasan días sin comer mientras se preparan para aparearse). Su propia naturaleza les hace difícil dejar pasar una comida y, creo, mientras se preparan para el desove, cuando necesitan cada ápice de energía para emparejarse y estar ocupados, están aún más sintonizados con la alimentación.
Finalmente, la trucha de arroyo antes del desove se concentrará alrededor de áreas de ríos y arroyos donde el hábitat de formación de color rojo es ideal. Esto crea más competencia entre los peces por el alimento y aumenta la probabilidad de agresión entre sí y hacia moscas entrometidas que podrían imitar algo que parece comida o una amenaza.
¿Cuál es el hábitat ideal? Busque áreas en ríos y arroyos que ofrezcan una buena mezcla de sustrato del fondo del arroyo: grava mezclada con rocas pequeñas. Aquí es donde se ubicarán los peces antes del desove y, a menudo, puedes verlos mientras compiten por los mejores lugares.
Una nota importante: en áreas del país donde los arroyos son nativos, desaconsejaría perseguir estos peces en las semanas previas al desove. En su área de distribución nativa, la trucha de arroyo es un recurso frágil con una serie de factores ambientales, que van desde la degradación del hábitat hasta el cambio climático, que actúan en su contra. Lo último que necesitan estos peces es que más pescadores intenten capturarlos mientras se preparan para formar la próxima generación importante de peces.
Entiendo que, con algunas excepciones notables, las truchas de arroyo son bastante pequeñas: un pez de un pie de largo de un pequeño arroyo occidental es un trofeo legítimo. Pero eso no significa que no perseguirán serpentinas o incluso ninfas pescadas en el columpio. Como pescadores, deberíamos hacer lo que las truchas de arroyo en Occidente han hecho durante más de un siglo: adaptarnos.
Los arroyos en los arroyos occidentales tienden a apoderarse de sus cuencas adoptadas y luego, con el tiempo, se sobrepoblan y eventualmente se atrofian; en algunos impresionantes arroyos occidentales, los arroyos constituyen la mayor parte de la biomasa, y un pez adulto en desove puede medir sólo seis pulgadas de largo. Entonces, armados con esta información, tiene sentido para nosotros, como pescadores, reducir los patrones que normalmente pescaríamos en el columpio.
Un Zonker talla 4 debería convertirse en un Zonker talla 10. Un Prince talla 12 podría convertirse en un Copper John talla 14. Ate más pequeño.
Considere agregar algo de color y algunos materiales que puedan mover un poco mejor el agua o llamar más la atención. En lugar de ese monótono Woolly Bugger verde oliva, ata una llamativa sanguijuela chupa huevos de tamaño 12 con una cuenta rosa brillante como cabeza. Agregue algunas patas finas de goma a un Slumpbuster chartreuse tamaño 10. Agregue esas mismas patas de goma a una oreja de liebre con cabeza de cuentas de tamaño 14. Es una gran oportunidad para ser creativo en el torno.
Esto no es una cirugía de cohetes. El columpio tradicional es ideal, sobre todo si puedes poner una mosca delante de varios peces. Una nota aquí: pescar arroyos mientras en realidad están desovando... bueno, sí, son invasivos en todas las cuencas occidentales que habitan. Pero siendo la ética de la pesca lo que es, probablemente sea mejor seguir tus instintos y dejarlos en paz.
Pero, ¿cuándo son los peces el escenario para el desove? Da un golpe. Lanza en un ligero ángulo río abajo y deja que la mosca se despliegue por encima de lo que probablemente contenga agua (y, en muchos casos, podrás ver el pez que buscas, lo que aumenta el atractivo de este método). No es diferente a perseguir grandes marrones mientras se preparan para desovar, o arcoíris o asesinos en primavera. Solo sea inteligente y reflexivo: lanzar peces en medio del desove es un paso en falso deportivo.
Balancear moscas es una maravilla. Balancear moscas pequeñas en aparejos ligeros en aguas pequeñas es aún más divertido, porque es íntimo y visual. No es necesario aumentar el tamaño de la caña de pescar: la mayoría de los 3 pesos pueden soportar una mosca un poco más pesada, siempre que el peso sea proporcional al tamaño del anzuelo.
Encuentra el pez y aléjate.
Entiendo que el agua más grande está llamando. Las multitudes posteriores al verano se han ido. Los cazadores están cazando. Como pescadores, tenemos “estaciones” y el otoño es un buen momento para que los pescadores de travesía salgan de las montañas y caminen y vadeen en busca de truchas grandes. Pero, durante unas preciosas semanas más, las tierras altas siguen siendo un gran lugar para pescar, especialmente si eres fanático de la trucha de arroyo. Ligeras adaptaciones a su técnica y patrones de mosca pueden resultar en una de las mejores pesca en brookie del año. Sólo necesitas estar en el lugar indicado para disfrutarlo.